QUE DESAPAREZCA EL VAR...¡SÓLO INTERRUMPE !
Luego de analizar la función y el objeto del llamado VAR, para el fútbol profesional en el mundo, podemos advertir que el aparato de visión arbitral, tiene buena presencia en Europa, pero no en Colombia, donde se han cometido una cantidad de atropellos, equivocaciones, y decisiones acomodadas a los intereses de los equipos más poderosos. El sistema arbitral, común y corriente, ha denotado que los centrales se sienten con poder unívoco, para determinar la justicia o no, en una situación determinada. Si tomamos en cuenta la mano penal que le fue castigada al Deportes Tolima, en la final ante el Cali, podemos observar el divisionismo que desató, porque es increíble, cómo un balón que viene de un mal cabeceo del delantero verde, pega en el brazo izquierdo del zaguero pijao, que no mostró ni mala intención, ni el deseo de parar el balón con su extremidad. Pero el señor arbitro, Alexander Ospina, determinó que era una mano clara y así pudo ayudar a la consecución de otro título para el onceno azucarero.
El VAR estuvo de acuerdo, sin razón poderosa, y menos sin la posibilidad de un verdadero análisis, que al menos dejara la posibilidad de no pitar, tan severamente, una jugada simple y normal. Quizá lo que se busca es implementar una nueva camiseta de fuerza para los futbolistas, o que jueguen con las manos amarradas, o tal vez, optar por amputar las manos y brazos de los balompedistas, para que una mano involuntaria, sea castigada con el cobro de los doce pasos. De verdad el var, sólo ha ocasionado pérdida de tiempo, reducir la intensidad del juego, el protagonismo arbitral y las decisiones equivocadas que inciden en el tanteador. Lo mejor sería, acabar con ese invento, si de verdad no se dan clases morales, éticas y disciplinarias, a quienes lo conforman, acorde al reglamento, pero acomodado a las circunstancias de juego y a una intención demostrable; o ¿por qué no? tener como en todo juicio, un acusador y un defensor, para que otro juez determine con propiedad y conciencia si hay que perdonar o solamente castigar y aplicar justicia.
Señores de la Federación, de la Dimayor, Colegios arbitrales, de la International Board, y la FIFA, dejamos ese trompo en la uña, para que ustedes como magnates del deporte de multitudes, mediten bien esto del VAR, que hasta el momento sólo produce desazón, desespero y abulia.
LES CUENTO UN MINICUENTO...
Un joven de 18 años, le hizo caso a un tío, para poder decirle sus sentimientos a una mujer encantadora, que lo tenía loco, por un beso, o un abrazo o qué se yo, un detalle tierno y dulce, que le diera ánimo para seguir viviendo. Pedro Alfonso, se fue bien temprano a un bar del centro citadino. Pidió al mesero, una cerveza, y después otra, pero no lograba el estado anímico para declararse. Entonces ordenó una botella de aguardiente, con la cual en los primeros diez sorbos, se sintió con ganas de salir corriendo a demostrar su "Amor" a la dama, Margarita, que con sus ojos grandes de color azul, su nariz respingada, su boca sonrojada y sus dientes de perla fina, y un hermoso cuerpo bien formado, aceleraban el corazón de Pedro Alfonso, que no hallaba el momento de declarar sus sentimientos.
El reloj marcó las siete y treinta de la noche de aquel martes 15 de marzo de 1995. El enamorado con botella en mano, con su cuerpo en balanceo, su cara rosada, sus ojos desorbitados, su cabello en desorden y su ropa maltrecha, timbró en la casa de su amada. Ella misma salió a su encuentro, pero cuando lo observó fijamente, y escuchó la frase: " Mi amor vengo a hacerte mía..." cerró rápidamente la puerta y por la ventana le gritó: "Irrespetuoso, borrachín, mujeriego...no me busques, no me interesa tener alguna relación con un vago como usted."
Descubre la frase, que se le puede decir a una mujer cantaletosa: PATICO.