NI SE COMPRA...NI SE VENDE...SE GANA

Como dice el pasodoble de la Feria de manizales:" ni se compra ni se vende... el cariño verdadero, no hay en el mundo dinero, para comprar los quereres..." Sí es verdad. Aunque, muchos digan lo contrario, el amor, el afecto, el cariño, la ternura, la simpatía o el rechazo no se puede comprar, o, no los venden en las tiendas y super- mercados. Todo apunta que, dependiendo de cómo es usted, su comportamiento, sus detalles, sus embarradas o sus aciertos, así mismo será el fruto de su cosecha. Si has dado mucho , puede recibir bastante, si no has dado nada, de eso mismo recibirás. Claro, aquí hay que hacer salvedades, porque hay personas que pagan mal a quienes les han servido, y personas que reciben sin haber dado.     Imagen:www.pinterest.es

Parece un juego de palabras; pero, la verdad dicha nos lleva hacia los caminos de la conquista, la fortuna o el infortunio. La competencia, el tener y el poder. De todo se da en la viña del señor. Los unos logran su objetivo, porque tienen pinta, físico o buena apariencia. Los otros porque están bien montados en autos lujosos, o, al menos en carros necesarios para el transporte y la vanidad. En este mundo, el no tener un vehículo es síntoma de rechazo,  pobreza, y  discriminación. Otra circunstancia que aflora, es el buen o mal vestir; el olor, el hablar y el hacer, que en determinadas situaciones dan buen resultado, así no se tenga un bien material.

Los hombres desafortunados admiten que las damas son materialistas. Las mujeres que los hombres son aprovechados, machistas y mujeriegos. En pareja argumentan que ambos son interesados, y aquí tienen razón, tanto caballeros como princesas, tienen un interés particular; ahí sí, que entre el diablo y escoja. Dicen algunos: quiero una chica que me respete y comparta conmigo siempre. Ellas, deseo un hombre que me valore, me de cariño y comprensión. Otras,  un hombre trabajador y responsable, que me lleve a pasear por todo el país. Los demás buscan una pareja estable, respetuosa, amable y de buenas maneras, que no golpee a las mujeres, ni  busque sólo sexo. Los menos, sólo tienen en su mente el libertinaje de brindar amor carnal a  toda persona que se cruce en su camino, como para llenar su ego. 

Con lo anterior sólo deseo dejar claro, que, en cuestiones del amor, lo mejor es poner el ojo bien abierto en la persona que cada cual desea; no en toda su dimensión, pero sí, en un 60 u 80%, para que después no se esté recriminando, por haber escogido la pareja no ideal. Recordando eso sí, que muchas veces el tiempo marca la distancia, o la diferencia. La rutina puede ser otra causal de deterioro en una relación. Los malos tratos de obra y palabra, otra consecuencia. El apego a su yo, también hace daño. El egoísmo, el orgullo y la vanidad igualmente, producen desapego. El poco sacrificio por el otro, empeora las cosas.

Por último, les digo que mendigar amor; rogar para que le den cariño; obligar a otro,con algo de lo que no quiere ni puede ofrecer; armar cuentos de hada, o, crear películas de ciencia ficción, es bien  maluco. Es propio de los ridículos y mediocres. 

ANÉCDOTA...ANÉCDOTA...ANÉCDOTA...

En plena capital del Tolima; en un barrio del sur, existían dos compañeros de aventura, de jugar el llamado pico y salgo, cinco huecos, ponchado, y el tradicional fútbol de barrio; con un balón de caucho o cuero, en porterías de piedra. Todo marchaba normalmente entre Wilson y Mario, hasta la noche del 6 de diciembre de 1974, cuando Wilson le pidió el favor a Mario, de llevarle un papelito escrito a mano y en una letra casi ilegible, a su enamorada. Su amigo le dijo que bueno, ya que ella vivía a unas seis casas de la suya.

Mario, luego de bañarse a eso de las seis treinta de la tarde, colocarse un buso de colores, con cuello blanco y jean, partió rumbo a su cometido; entregar la carta de amor, de Wilson para Yolanda. Mario, un moreno de ojos negros, vivaracho, de sonrisa a flor de labio, bien hablado, de estatura promedio, ligero de andar y cuerpo de atleta, golpeó la puerta de lata de la destinataria. Cinco minutos después, una dama un poco mayorcita, abrió el elemento de ingreso a la humilde vivienda, y le dijo: ¿Qué necesita niño? A lo cual el muchacho contestó: "por favor la señorita Yolanda?---Sí. ¡Ya se la llamo! En un cerrar de ojos, Mario vio la imagen de una linda jovencita, con una sonrisa hermosa, blanca, reluciente, con un cabello ondulado, amonado, y un cuerpo de reina de once años. A lo cual le dijo que traía un recado para ella.

La damita le indicó, que quién era ese muchacho. Que ella no lo distinguía, y por tanto no le interesaba ninguna razón. A lo cual el valiente moreno advirtió que la noche estaba estrellada. Que ella era una de esas estrellas. Agregando con voz suave, pero segura:" Lástima por mi amigo" y ella lo interrumpió con palabras halagadoras: " ¡uy pero usted es un romántico! --¿De verdad le parece?----es que usted me inspiró a ello. Dijo el hombrecito. Segundos después, en su interior surgió el hombre conquistador, que le obligó a preguntar:"¿ Le agradaría ser la dueña de mi corazón?----¿De verdad?---preguntó ella. Sin más vacilaciones cupido hizo que la señorita le plasmara un suave, inconfundible y delicioso beso a flor de labio, que estremeció las entrañas de este joven amable y atento; quien, para cerrar con broche de oro, su diligencia, devolvió otro beso con fuerza, apretujón y compromiso, sellando así el comienzo de una linda relación, entre dos niños ,que del infortunio de otro,  ganaron un tesoro, sin buscarlo.

JUGUEMOS A DESCUBRIR...

Con la palabra ,Murciélago, hallemos  varios vocablos de dos , tres y cuatro sílabas.  Tiempo para el ejercicio... diez minutos. Combine las letras.